Muchas personas aseguran que han recibido una llamada, una última llamada de un familiar o ser querido que había fallecido hace poco o ya llevaba muerto varios años. Esta llamada de el más allá los ha dejado tocados de por vida.
Los siguientes relatos son relatos reales de personas que un día recibieron una llamada, una llamada tan imposible como cierta, una última llamada hecha desde el mas allá.
´´ Estaba en un examen importante en la universidad y al terminar el examen y salir de la faculta me llamó mi abuela. Ni siquiera me dejó saludarla, simplemente me dijo -No te preocupes hija, ya he llegado, estoy bien.
Me quedé preocupada por la llamada así que decidí ir a su casa. Al llegar vi un coche fúnebre en la puerta y también a mis padres. Me dijeron que mi abuela había muerto por la noche, de un infarto, y que la acababan de encontrar muerta en su cama, entonces entendí el significado de la llamada tan aterradora pero a la vez especial. ´´
´´ Una noche a las 3:30 de la madrugada llamaron al teléfono fijo de casa, al contestar se oía la voz de una mujer mayor. Yo le preguntaba quien era pero ella me respondía -¿Quién eres tu ? Me estuvo preguntando todo el rato lo mismo durante la conversación así que colgué. Me fijé en el prefijo del número y me metí, a esa hora, en el ordenador para averiguar de que zona se había realizado la llamada. Era del norte de España e inmediatamente al averiguar esto reconocí a la persona que había llamado. Era una amiga de la familia que veraneaba con nosotros todos los años. Al día siguiente mi madre la llamo pero ella seguía preguntando lo mismo. Mi madre, preocupada, llamó a la familia de la anciana mujer y la noticia que nos dieron nos impactó. Había muerto la noche anterior. ´´
´´ Yo trabajaba de comercial telefónica, ofrecía nuevos servicios de internet a los clientes de la compañía. Un día llamé a la zona de la costa para ofrecer una nueva tarifa de internet a una cliente llamada Maria. Me contestó una voz masculina, con tono cordial le pregunte si se encontraba Maria, la titular de el servicio y me respondió que no, que el era su hijo Rubén, que Maria era su madre y no estaba, en tono seco y frío. Yo seguí ofreciéndole la oferta pero el no me respondía, prácticamente esa conversación telefónica era un monólogo mío, así que le dije que se lo comentara a su madre y que volvería a llamar después de una semana.
Caí enferma y estuve ausente en mi puesto de trabajo durante una semana. Por motivos de igualación y retraso en mi trabajo llamé a la titular Maria después de tres semanas. Al responderme le dije que había estado hablando con su hijo a cerca de una nueva oferta y lo que me contestó me dejó absolutamente cortada. Me dijo con tono de dolor que no estaba para bromas de mal gusto. Yo le insistí en que había estado hablando con su hijo sobre una oferta en su tarifa de internet a lo que ella respondió con tono lloroso - Yo solo he tenido un hijo y murió hace un año en un accidente en la mar-. Le pregunté como se llamaba su hijo y me respondió que su hijo se llamaba Rubén e inmediatamente colgó, yo me quedé con la sangre helada. Tiempo después supe que la llamada coincidió con el aniversario de la muerte de aquel muchacho. ´´
´´ Mi madre mientras hacía la comida recibió una llamada a su teléfono móvil, lo extraño era que en la pantalla no salía ningún número, al contestar saltó de inmediato el operador de la compañía diciendo que había un nuevo mensaje de voz. El mensaje decía -No os preocupéis, ya he llegado y estoy bien-. Mi madre bajó corriendo al salón y nos enseñó el mensaje, era un familiar nuestro, muy querido por todos, que había muerto hace cinco días. ´´
´´ Mi abuelo Pablo era una persona muy apacible y antes de morir nos decía a todos que cuando el faltara nos lleváramos bien. Cundo murió nos instalamos en casa de mi abuela y a veces discutíamos.
Un día discutimos fuertemente y yo me fui muy enfadado a la faculta dejando a mi abuela sola en casa. Cuando volví mi abuela con gran normalidad me dijo que había llamado mi abuelo. Yo le decía que eso era imposible porque el abuelo llevaba muerto varios meses y ella insistía en que había llamado, y le pregunté que qué decía el abuelo a lo que me contestó que lo podía escuchar si quería, que el mensaje estaba grabado. Puse el mensaje y efectivamente era la voz de mi abuelo y el mensaje era corto y simple, decía - Que os llevéis bien-, con el tono tan tranquilo y apacible que el siempre tuvo. Me quedé en blanco y al enseñarle el mensaje a mi madre, se puso a llorar, borró el mensaje y dijo que no quería saber nada de aquello. ´´
Estos son algunos relatos reales pero podríamos contar cientos. Una llamada desde el más allá con un mensaje claro. ¿Como nos afectaría a alguno de nosotros? ¿Nos daría paz y tranquilidad saber que aun están esos seres queridos que se fueron ? ¿O nos perturbaría? ¿Podrías escuchar la última llamada ...?
